Aprendizaje por Servicio, mejor conocido como Service Learning en inglés, es una propuesta atractiva para fomentar un aprendizaje activo en nuestros alumnos, ya que todo lo que ellos están aprendiendo en el salón de clases, en cada una de sus materias, pueden utilizarlo para generar un proyecto de servicio comunitario, en donde se puede beneficiar a una comunidad en específico, una asociación, un grupo, etc.
Esta propuesta logra sacar lo mejor de cada uno de nuestros alumnos, el dar siempre nos provoca alegría, puede ser nuestro tiempo, dinero, esfuerzo, trabajo; los seres humanos estamos programados para ser generosos. Por lo que van a generar un bien a su comunidad y a la par incrementar su aprendizaje de manera vivencial. Por otro lado, logramos acortar el tiempo que tendrían que esperar hasta cursar la universidad para tener sus prácticas pre profesionales, las estarían viviendo desde temprana edad. Sus clases toman sentido y se vuelven prácticas y extraordinarias.
Son 5 los pasos para poder implementar la metodología de manera efectiva, son muy sencillos y además ayudan a poder estructurar los proyectos con un inicio y fin.
Investigación: Este paso es muy importante, es en donde los alumnos logran visualizar los acontecimientos importantes que están sucediendo en sus comunidades, la problemática local y global. Es muy importante la labor docente en este paso, ya que si no logramos que ellos profundicen en las necesidades que existen y en todo lo que ellos pueden aportar, será difícil motivarlos durante el transcurso del proyecto.
Planeación: Esta etapa es muy divertida y está llena de retos, ya que es en donde los alumnos establecen los lineamientos de su proyecto como la fecha de inicio, fecha de término, a quién se va a beneficiar, material necesario y todo lo relacionado a la logística, en algunos casos serán necesarios recursos económicos, estos los pueden conseguir vía patrocinios, donativos, rifas, etc. Aquí nosotros fungimos como un coach, en dónde no debemos darles la respuesta o solución a la problemática, más bien, debemos de hacer las preguntas clave para que ellos lleguen a sus propias soluciones y propuestas. Todo tiene que quedar listo antes de pasar al siguiente paso.

Acción: Aquí, es en donde todo lo planeado y por lo cual se trabajó durante un tiempo, va a ser llevado a cabo, dependiendo del proyecto en el que se trabaje, a veces puede durar un día, una semana o más tiempo. En esta etapa, muchos alumnos se dan cuenta que su esfuerzo valió la pena, que están ayudando a alguien en específico, y la mayoría de las veces, lo ven con sus propios ojos.
Vale la pena que nosotros seamos uno más en el equipo en este paso, si hay alumnos líderes de áreas, es bueno dejar que ellos mismos sean los que dirijan y nosotros apoyemos como un elemento más, eso los empodera y ayuda en su autoestima, descubren que son capaces de planear y liderar proyectos. Empiezan a tomar responsabilidades y muchos mantienen la motivación de seguir generando proyectos después de ver los resultados obtenidos.

Reflexión: Esta etapa es maravillosa, ya que ellos mismo evalúan su desempeño de manera individual y grupal, platican sobre las futuras oportunidades que encontraron en el lugar o comunidad beneficiada, descubren sus posibles errores y plantean soluciones para mejorar el resultado obtenido.
En mi experiencia personal, yo les recomiendo siempre ser guías positivas, si algo salió mal durante la acción, busquen que ellos no se culpen, sino que reflexionen acerca de lo que estuvo mal y cómo puede mejorarse, con el firme propósito de volverlo a intentar. Explicarles que lo que hicieron fue un prototipo de proyecto, en donde se planea, se prueba y si algo sale mal, se regresa a la mesa de planeación y se cambian pasos/ideas en el proceso. Lo que se busca es que los alumnos no se desmotiven y se queden con un mal sabor, sino que vean los fracasos y errores como una oportunidad para crecer.
Demostración y Celebración: Los alumnos demuestran a la comunidad lo que hicieron, esto con el fin de motivar a otras personas a realizar proyectos de servicio comunitario y profundizar aún más en su aprendizaje, ya que cuando uno puede platicar acerca de su experiencia, refuerza lo aprendido. Además, al repetir las cosas en voz alta, por lo regular surgen respuestas y otros descubrimientos que no habíamos analizado.

Los invito a intentarlo, vale la pena. Les dejo el enlace a mi artículo “Implementando un proyecto de servicio comunitario sin morir en el intento” https://pedagogiatic21.wordpress.com/2018/12/07/implementando-un-proyecto-de-servicio-comunitario-sin-morir-en-el-intento/
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